La guía de Dios
Cuando el banco accidentalmente depositó 120.000 dólares en su cuenta, una pareja salió a comprar de todo: una SUV, una casa rodante y dos camionetas 4x4, además de pagar todas las deudas. Al descubrir el error, el banco les dijo que devolvieran el dinero, pero ya lo habían gastado, y fueron acusados de hurto intencional. Cuando llegaron a la corte local, el esposo le dijo a un reportero: «Seguimos un mal consejo legal». Así aprendieron que seguir un mal consejo (y gastar lo que no era de ellos) podía llevarlos a un caos en sus vidas.
Dulce otra vez
Las costumbres nupciales en Rusia están llenas de belleza y significado. Una de ellas se lleva a cabo durante la fiesta de bodas, cuando el maestro de ceremonias propone un brindis en honor a la pareja. Todos beben un sorbo de su copa levantada y gritan: «¡Gor’ko! ¡Gor’ko!», que significa: «¡Amargo! ¡Amargo!». Entonces, los recién casados deben levantarse y besarse para que la bebida recupere su dulzura.
No nos soltará
Julio cruzaba en bicicleta el puente George Washington —una ruta transitada de doble calzada que une la ciudad de Nueva York con Nueva Jersey—, cuando enfrentó una situación de vida o muerte. Un hombre estaba parado en una plataforma sobre el río Hudson, listo para saltar. Como sabía que la policía no llegaría a tiempo, Julio saltó de la bicicleta y corrió con los brazos extendidos, diciendo: «No lo hagas. Te amamos». Entonces, como un pastor con un cayado, abrazó al hombre consternado, y con la ayuda de otro transeúnte, lo puso a salvo. Según los informes, Julio no soltó al hombre, aun después de que estaba a salvo.
Maravillosamente únicos
Los seres humanos no son especiales; al menos, según el Zoológico de Londres. En 2005, se presentó allí una exposición de cuatro días: «Los humanos en su ambiente natural». Los humanos «en cautividad» se escogieron mediante una encuesta en línea. Para que las visitas entendieran sobre los humanos, se hicieron carteles detallando la dieta, el hábitat y las amenazas para la especie. El propósito era minimizar la singularidad de los seres humanos.
Día del adiós
Desde 2006, un grupo de personas ha celebrado un evento inusual en torno al Año Nuevo. Se llama Día del adiós. Basado en una tradición latinoamericana, la gente escribe recuerdos desagradables y asuntos embarazosos del año que termina, y los tiran en una trituradora industrial. Incluso, algunos golpean con una maza el artículo al que quieren decirle adiós.
Él llevó nuestras cargas
No es inusual que las facturas de servicios públicos sean sorprendentemente altas. Pero Kieran Healy, de Carolina del Norte, en Estados Unidos, recibió una cuenta de agua que te haría detener el corazón: ¡debía 100 millones de dólares! Seguro de que no había usado tanta agua el mes anterior, en chiste, preguntó si podía pagar la deuda en cuotas.
Clamor por ayuda
Después de 5 muertes y 51 heridos en accidentes de ascensores en 2016, la ciudad de Nueva York lanzó una campaña para educar a la gente para mantenerse en calma y a salvo. Los peores casos fueron de personas que intentaron salvarse por sus propios medios. Las autoridades dicen que el mejor plan de acción es: «Llamar, relajarse y esperar», ya que el personal de rescate está comprometido a responder de inmediato para proteger a los atrapados y rescatarlos.
Alivio en la entrada
Un día particularmente cálido, Carmine McDaniel, de ocho años de edad, quiso asegurarse de que el cartero de su vecindario se mantuviera fresco e hidratado. Entonces, dejó una nevera portátil con bebidas en la entrada de su casa. La cámara de seguridad de la familia registró la reacción del cartero: «¡Vaya! Agua y Gatorade. ¡Gracias, Dios; gracias!».
Por el poder del Espíritu
¿Qué haces cuando una montaña se interpone en tu camino? La historia de Dashrath Manjhi es inspiradora. Cuando su esposa murió porque no pudo llevarla al hospital, Manjhi hizo lo que parecía imposible. Pasó 22 años tallando una enorme abertura en una montaña, de modo que los otros aldeanos pudieran llegar al hospital para que los atendieran. Antes de morir, el gobierno de India lo condecoró por su logro.
Con la ayuda de Dios
Con el paso de los años, fui sintiendo más dolor en las articulaciones; en especial, en días fríos. A veces, no me siento una conquistadora, sino alguien conquistada por los desafíos de entrar en la tercera edad.